¿Has experimentado la sensación de haber botado un dinero que guardaste en tu bolsillo? O, quizá le prestaste dinero a un amigo y los días pasan, ¿pero nada que te paga? Si tu respuesta es afirmativa, probablemente has llegado al punto de pensar que ese dinero ¡ya se perdió! Y no solo eso, sino también la amistad de tantos años con esa persona especial. Lo mismo puede pasar cuando hablamos de esas ventas que ya hiciste pero que pasa el tiempo y aún no llega el pago, estamos hablando de las innombrables cuentas por cobrar, las cuales puedes estar descuidando y en el peor de los casos, desconociendo.
Pero no te preocupes, no tienes que saberlas todas como te lo puede exigir el “yo” interior, lo más importante se basa en reconocer que, en los negocios podemos encontrar equipos de trabajo y herramientas que nos permitirán fortalecer los procesos administrativos para seguir avanzando. Es así como nace nuestro deseo de poder apoyarte y compartir contigo tres (3) puntos esenciales para el manejo de tu cartera.
1. Analizar el riesgo
Para el análisis del riesgo debe partirse de una pregunta fundamental: ¿Cómo se encuentra mi musculo financiero? El análisis de las finanzas es el paso inicial para determinar el monto y el tiempo máximo de espera para el pago por parte de tus clientes. Una vez se tiene noción de ello, es importante identificar en cada cliente elementos como su capacidad de endeudamiento, su reputación comercial y algunas ideas sobre su flujo de efectivo.
¿Qué pasaría si un cliente se toma más de 90 días para pagar cuando realmente tiene 30 o 45 días máximo? Y si ¿Los pagos de tus clientes se ven afectados por una pandemia? Y porque no… ¿Si uno de tus clientes se ve obligado a finalizar su operación porque no tiene cómo responder antes sus compromisos financieros? Estamos en un tiempo donde algunas de estas preguntas se han convertido en la realidad de muchas empresas, ante lo cual debes tener acción inmediata para no quedarte atrás. De ahí, la importancia de analizar el riesgo de tus cuentas por cobrar, pero cuidado, esto no significa tener una perspectiva negativa o pesimista de tus finanzas o de tus clientes, todo lo contrario, significa estar dos pasos adelante para preparar y ejecutar estrategias oportunas.
2. Respalda tu deuda
“No dejes para mañana, lo que puedes hacer hoy” esta frase tan común nos recuerda un valor determinante que debemos cultivar y desarrollar como empresarios, ¡la diligencia! en negrilla para que no se te olvide, conocido como el arte de actuar cuidadosamente sin dejar escapar ningún detalle para después por más mínimo que parezca, y es que en el campo de los negocios debemos evitar que nuestra empresa descuide los procesos de recaudo, pues si somos muy confiados algunos clientes aprovecharan las oportunidades que les demos para retrasar los pagos y más aún cuando sí son conocidos en el medio.
Nuestro segundo punto esencial para el buen manejo de cuentas por cobrar, es garantizar el cumplimiento de los créditos que estás otorgando a terceros, y si te preguntas ¿Cómo hacerlo? Existen diferentes métodos seguros y legales que pueden representarse a través de un pagaré firmado por tu cliente en la apertura del crédito, es decir, antes de iniciar esta nueva etapa, o un contrato en el cual se establezcan las condiciones a cumplir por las partes interesadas. Todo depende del tipo de negocio que estés acordando con tu cliente. Así que, se un buen administrador de tus finanzas, se diligente.
3. Controlar y evaluar continuamente los créditos activos
Somos de aquellos que creen que toda buena acción puede ser opacada por un escaso control, en otras palabras, todo aquello que puedes planear y ejecutar con mucho esfuerzo se puede ir al piso si no hay un control adecuado, probablemente sabes que es real, pero te puede costar aplicarlo en tus tareas diarias por falta de tiempo… Por ejemplo, ¿cada cuánto estás evaluando el informe de cuentas por cobrar? ¿Cuál es el tiempo que más ha tardado un cliente en pagarte y cuál es ese cliente? ¿Por qué tus clientes se están atrasando? Y si seguimos, pueden surgir más preguntas para determinar el nivel de control que estás llevando a la gestión de cartera y darte cuenta que es un aspecto fundamental para obtener el flujo deseado y no fracasar en el intento.
Es importante de controlar minuciosamente cada una de las cuentas de tus clientes y estar más cerca de ellos, esto te lleva a conocerlos un poco más no solo como clientes sino como empresarios, recuerda que después de la venta es necesario realizar un recaudo efectivo a través de avisos sobre las fechas de vencimiento de los plazos y seguimiento juicioso al estado de la cuenta, una buena cobranza impacta positivamente la relación con el cliente. Aún estás a tiempo de tomar acciones y no dejar que otros controlen lo que tanto trabajo te ha costado.
Esperamos que este espacio te sirva para seguir creciendo en la administración de tus finanzas y sobre todo en la buena gestión de tus cuentas por cobrar, no se basa simplemente en conocer que las cosas se están haciendo mal y quedarse en eso, es necesario cambiarlas y hacerlo ahora. Y si necesitas una mano, somos Mamba.
Mamba